Consejos en Dos Minutos  

Mejora tu gestión definiendo el mantenimiento

Henry Mendoza | Ingeniero de Confiabilidad, Supermetanol, C.A

Probablemente, en la mayoría de las industrias, existen diferentes ideas acerca de los tipos de mantenimiento y las definiciones de cada uno de estos; los debates en este punto pueden ser difíciles debido a que hasta cierto punto, cualquiera podría estar en lo correcto. Por esta razón, es importante establecer el mismo criterio entre todas las partes involucradas directa e indirectamente con mantenimiento de manera que los conceptos entre sí sean los mismos, y esto puede alcanzarse a través de un estándar.

La unificación de términos, procesos y clasificaciones ha sido el propósito en general de las normas, y para el área de mantenimiento estas son diversas entre sí. Hay dos normas de interés, reconocimiento y gran adopción a nivel mundial y son los estándar ISO 14224 y  UNE 16306. Estas contienen clasificación y definiciones del mantenimiento las cuales pueden ser de mucha utilidad al momento de establecer criterios dentro de la organización.  Entre las consideraciones que se pueden tener presente para establecer un consenso en los términos del mantenimiento están:

  • Determinar la filosofía de mantenimiento que necesita la organización: aunque el término “filosofía” puede ser objeto de debate, básicamente en este punto nos referimos a definir la forma general en la se requiere y se espera que mantenimiento trabaje; hay organizaciones donde no se puede esperar que las máquinas y/o componentes operen hasta su daño inminente (por razones económicas, ambiente, seguridad, etc) pero hay otras donde esto puede resultar factible (y suele ser muy común este último esquema).
  • Adoptar un estándar con el que se pueda identificar la filosofía de mantenimiento: No hay una norma necesariamente mejor que otra en este particular, simplemente una puede tener mayor identidad con los objetivos de una organización en particular, es por eso que conviene revisar estándar disponibles (ISO, UNE, COVENIN, etc.) y escoger el más idóneo.
  • Ajustar definiciones entre el estándar y el CMMS: Los software para gestión de mantenimiento ya incluyen una clasificación de los tipos de mantenimiento para asociarlo a las tareas, sin embargo estos no suelen estar definidos, es por ello que resulta de interés establecer un criterio donde se pueda consolidar la clasificación del CMMS con el de la norma adoptada y manejar la gestión en función de esto. Esta parte resulta de interés porque a partir de esto, se calculan los indicadores de gestión.

Alcanzar los objetivos de una definición de criterios no es sencilla. Requiere tiempo, gestión del cambio, derrumbar paradigmas y “tradiciones”, entre otras cosas. Si bien para algunos puede resultar una tarea irrelevante, la realidad es que tiene un impacto importante al momento de evaluar la gestión, ya que cada tarea que se emite para ejecución se vincula a un tipo de mantenimiento. Un ejercicio interesante que puede brindar un panorama acerca de los criterios es abrir un debate con dos preguntas simples: ¿Cuántos tipos de mantenimiento hay? ¿Cuál es la definición de cada tipo de mantenimiento?

SOBRE EL AUTOR

Henry Mendoza Ingeniero de Confiabilidad, Supermetanol, C.A

Henry es ingeniero mecánico egresado de la UNEXPO, tiene experiencia en el área de mantenimiento y confiabilidad en los sectores de alimentos y petroquímicos, donde ha laborado en cargos como inspector de equipos rotativos, técnico de mantenimiento, planificador y supervisor de mantenimiento. Actualmente se desempeña como ingeniero de confiabilidad.